A partir del próximo año el Ayuntamiento de
Guadalajara comenzará a exigir un pago por los residuos sólidos que,
tanto pepenadores como otros "intermediarios", extraen de la recolección
diaria que hace la autoridad municipal a los hogares de la ciudad, a
través de su concesionaria Caabsa.
El coordinador del PAN
en Guadalajara, Alberto Cárdenas Jiménez, informó que la Ley de
Ingresos aprobada por el Ayuntamiento para el año 2014, y remitida al Congreso del Estado,
incluyó su planteamiento, el cual consiste en la creación de un cobro
que va de uno a 100 pesos por kilógramo de basura vendida, dependiendo
del material del que se trate.
Alrededor de los residuos sólidos
domésticos que genera la ciudad de Guadalajara, dijo Cárdenas Jiménez,
existen "líderes" que han estado obteniendo grandes "utilidades"
económicas al paso de las décadas a partir de su comercialización, pero
sin que ésta le retribuya un ingreso a las arcas públicas, a pesar de
que los mismos son propiedad municipal.
Bien aplicado, el
coordinador panista asegura que este nuevo impuesto tiene el potencial
de generar cientos, y si no, al menos decenas de millones de pesos para
el Ayuntamiento tapatío, de ese tamaño es el negocio de los residuos
sólidos. En Guadalajara, abundó, la basura "sí se recicla, no de ahora,
de tiempo atrás...siempre se ha reciclado", pero a través de estas redes
que no enteran ningún pago a la hacienda municipal, aunque se apropian
de materiales como papel, cartón, vidrio y aluminio.
En
Guadalajara se producen mensualmente 57 mil toneladas de residuos
sólidos, el ex gobernador de Jalisco estima que la mitad de esta
cantidad pueda estarse reciclando de esta forma, con réditos para
particulares pero sin impactar el presupuesto municipal
Para éste
y otros temas que tienen que ver con la gestión integral de los
residuos, el Gobierno municipal está por iniciar una mesa de trabajo y
de estudio; cada año se erogan 350 millones de pesos en la recolección y
disposición de la basura.
|